Si partimos de la base judeocristiana de que “la Biblia es un libro de ejemplos morales eternos”, debemos atenernos a que el creyente judeocristiano es una persona que los sigue y emplea en su vida cotidiana. En este articulo veremos algunos de esos ejemplos. Esta vez en lo relativo al machismo que contiene dicha biblia . Aunque por supuesto , en un acto de autonegación, el creyente siempre los desmentirá y tergiversará (cada uno interpretándolos a su manera) para no sentirse ofendido por lo que narra y dicta su libro más sagrado y en definitiva el dios en quien el cree. Convirtiéndole así en una persona machista.
Por suerte.. ya sabemos que la mayoría de los creyentes judeocristianos de hoy en día solo escogen de la biblia lo que más les interesa. Las personas de esta época tenemos unas normas y conductas morales diferentes a las que habían años atrás (por desgracia no todos). Y aunque los creyentes encierran un cierto machismo sociocultural, no es el machismo hebreo de la época bíblica o de la minoría de los fieles más literarios (fundamentalistas) a las escrituras.
“Y yo he hallado más amarga que la muerte la mujer, la cual es redes, y lazos su corazón; sus manos como ligaduras. El que agrada á Dios escapará de ella; mas el pecador será preso en ella.”
—Eclesiastés 7:26
Se logra entender que el judeocristiano de genero masculino sienta indiferencia o apoye en cierta medida la religión, lo que no se entiende es que las mujeres sigan creyendo en esta y apoyándola a pesar de estar discriminadas tanto por las leyes directas dadas por el Dios literario (Jehová,Yahvé) como en las narraciones e historias que figuran a lo largo de toda la biblia.