Errores geográficos neotestamentarios: los autores no conocían la zona y se basaron en traducciones griegas
Los evangelios, pese a la creencia, no fueron escritos por autores judíos, ni por habitantes del Israel y Palestina de aquella época. Esto se comprueba cuando uno analiza las afirmaciones que esos realizaron o cómo se expresaban. Incosncientemente, estos autores de habla y cultura helena, dejaron expresiones, situaciones y juegos de palabras que sólo podrían haberse producido de ser esto así. Más adelante, en otros artículos, mostraré a qué me refiero con este tipo de errores, hoy prefiero dedicarlo a otros: los geográficos. Errores que sólo alguien que no conociera la zona y escribiera de oídas habría cometido. Errores que, además, muestran que dichos autores se sirvieron de una traducción griega y no hebrea de la Biblia: la LXX o Septuaginta. Pues de haber optado por una hebrea no estarían implícitos dichos fallos.